Hace un par de días viendo las noticias en la 1ª cadena de la Televisión Española, el "telediario" de toda la vida, el presentador anunció un reportaje de investigación de la propia cadena. Por el tono de su voz y por sus palabras parecía algo de suma importancia y de gran trascendencia. Algo que estaba produciendo un gran daño a nuestra sociedad del bienestar y a nuestras instituciones.
¿Pero quienes podían ser esos pérfidos malignos a los que se refería el presentador con su voz misteriosa y melodramática? Eran ... "Los piratas de la basura".
Unos rufianes que "se amparan en la noche" y que "se están lucrando" con una propiedad municipal.
No amigos, no son unos delincuentes que roban la luz del alumbrado público, ni que trucan sus contadores de agua, ni roban las tapas de las alcantarillas para venderlas por chatarra, no desvalijan los cajeros de los bancos, ni se cuelan en la cola del Metro... es peor aún: Recogen las bolsas de basura repletas de papel deshechadas por las oficinas de las zonas comerciales y administrativas de Madrid y se la llevan en camiones repletos hasta arriba para venderlas al mejor postor en las plantas de reciclaje.
Hasta salió una representante municipal escandalizada con este hurto de la propiedad municipal.
La policía, que no es tonta, ya ha impuesto 21 multas, pero esta "ilegalidad se comete a diario"
Los que vivimos en Madrid, y me imagino que en las grandes ciudades, llevamos viendo esta recogida de papeles y cartones desde hace años. Muchos años. Y nunca había sido noticia, ni nunca había sido un problema. Pero ahora es que los precios del papel andan por las nubes y el ayuntamiento de Madrid no quiere perder su tajada.
Terminarán expropiando los cartones a la gente que duerme en la calle.
Menudo papel el del ayuntamiento de Madrid.
